correos XVIII arte, teoría, psicoanálisis 2
My Dear J:
pocas veces una argumentación aparentemente “en contra” – algunos tramos por lo
menos entendí que hacen contrapunto con algunas consideraciones que envié – me
parecieron tan “a favor”.
Por supuesto
se trata de puntos de vista, como señala por ahí R. Laing: puntos desde donde
se ve. No hay sólo uno, y uno mismo puede ir desplazando su punto de vista o de
mira cada vez. No se trata de eclecticismo o tibieza sino de movimiento.
Precisamente, de liberarse de la teoría.
El lenguaje de
cada uno – quizás sería más ajustado decir lo que cada uno dice – está ciertamente poblado de contradicciones flagrantes en el terreno
lógico. No me aflige. Al contrario: es por ahí por donde progresan las
prácticas: políticas, artísticas, también científicas. Detrás vienen los
lógicos – cuando no son dinosaurios del tipo M. Bunge – a intentar escribir una
lógica de eso nuevo que salió a la luz.
La dirección
de la cura es precisamente la que el acto de hablar traza (lo digo así
porque para mí es importante aquí que el genitivo no oscile)
La teoría, más
que en el resto, la situaría en el lugar de la escoria – abusando de esa
distinción que hace Lacan en el seminario. Me parece un movimiento de sutura de
ese des-encuentro que es siempre el “encuentro” del sujeto con lo real. Me
resulta, sí, arrogante y ridícula en sus pretensiones. Pero en fin, no voy a
insistir en eso.
Pero bueno,
coincido absolutamente con lo que decís del trazo, del toque y es una ilustración
realmente lúcida de lo que es un decir! – aclarar que es de
cada uno es ya, seguramente una redundancia. Y nunca estudiaron!! Qué se
puede agregar a esto?
Un abrazo, n
Etiquetas: correos XVIII arte teoría psicoanálisis 2
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio